Singapur supone un punto clave en el calendario de Fórmula 1. Con los circuitos de bajo drag fuera de vista, los equipos vuelven a las configuraciones tradicionales de alta y media carga aerodinámica en lo que supone el sprint final hacia el final del campeonato del mundo. Los coches no regresarán más a las fábricas, a excepción de piezas que requieran cierta reparación, por lo que las escuderías aprovecharán los fines de semana restantes para probar todo tipo de novedades tanto para este año como para el siguiente.
Uno de los circuitos marcados en el calendario para Mercedes es el situado en Marina Bay. La multitud de curvas lentas nunca se le ha dado especialmente bien a la marca germana en la era híbrida debido a la tracción, setup, calentamiento de gomas y suspensión. Es por ello que la escuadra alemana se prepara a conciencia cada año para minimizar daños de cara al Campeonato de Constructores y de Pilotos. Con el nuevo reglamento, el W08 ha sido concebido con demasiada batalla (distancia entre ejes) para ganar carga aerodinámica con mayor número de elementos en el fondo plano. Sin embargo, el monoplaza con base en Brackley, sigue sufriendo en este tipo de trazados más lentos y para ello ha preparado una serie de novedades que ayuden a disminuir la pérdida de rendimiento.
La flecha de plata ha equipado una nueva versión de la aleta de tiburón que maximiza su superficie en conexión con el pilón central del alerón trasero. Un problema que tiene la aleta de tiburón con este reglamento es el subviraje a gran velocidad, ya que los nuevos neumáticos traseros 8cm más anchos provocan mucha más resistencia al avance que los de 2016, por lo que la aceleración angular a cierta velocidad será más complicado. Al añadir esta aleta, se agrega un nuevo momento autoalineante (fuerza transversal) por detrás del centro de giro con mismo sentido, que provocará que sea mucho más complicado girar en curva rápida, es decir, un subviraje más elevado, por lo que los equipos deberán tener especial cuidado en esta zona. Mercedes ha estudiado concienzudamente la forma de reducir este subviraje aprovechando la estabilidad que le proporcionará la baja velocidad media del trazado singapurense.
Por otra parte, el difusor luce este fin de semana una nueva aleta en los extremos cuyo propósito no es otro que el de lanzar un gran vórtice sobre las turbulencias generadas por el neumático posterior en su parte trasera que reduzca las bajas presiones que afectan de forma negativa al rendimiento del difusor y alerón trasero a la hora de generar carga aerodinámica.