Con el Gran Premio recién acabado tienen lugar en el Red Bull Ring dos días de test de temporada en el que los equipos han probado distintos artilugios con cierta libertad de reglamento para poner a punto y seguir con el desarrollo en vísperas del Gran Premio de Gran Bretaña en Silverstone en 2 semanas.
Williams es uno de esos equipos que ha deslumbrado con un elemento nunca visto hasta ahora dentro de la normativa vigente. El FW37 lucía la primera mañana de pruebas dos curiosos ‘Monkey Seat’ en los laterales del suelo a modo de pequeñas aletas que recordaba a la época más aerodinámica de 2005/2006. Este curioso componente aumenta de manera sustancialmente rápida la carga aerodinámica en el tren trasero así como reduce el drag ya que el flujo de la rueda es expulsado de forma mucho más eficaz lo que mejora ostensiblemente el desgaste de las ruedas. Por esta razón Williams ha empleado estos elementos para estudiar qué carencias tiene el FW37 y de qué forma pueden mejorar para alcanzar en el campeonato a Ferrari.
Esta innovación viene acompañada de dos pequeños faldones que aumentaría también el efecto suelo junto al neumático sellando aún más tod ala zona del difusor ganando una carga aerodinámica que bajo la actual reglamentación sería imposible. Cabe añadir que en Williams se descartó a medida que avanzó la tarde tras instalar distintos sensores en diversas zonas de dicha región.
Sin embargo esta ingeniosa solución no está permitida dentro del reglamento. En 2009, cuando entró vigente la reducción radical de la aerodinámica, la FIA eliminó todo tipo de apéndice en los pontones dejando una mínima región en la que entran los slots que se instalan en los extremos del fondo plano, siempre y cuando no pueda ser visto el asfalto visto desde arriba.
La normativa que impide que dicho elemento pueda ser usado viene reflejado en el Artículo 3.8.4 del Reglamento Técnico que cita lo siguiente:
Cualquier sección transversal vertical de la carrocería normal a la línea central del coche situado entre los volúmenes definidos a continuación debe formar una curva tangente continua en su superficie externa. Esta curva continua tangente no puede contener ningún radio menor de 75 mm:
a) El volumen comprendido entre los 50 mm por delante de la línea central de la rueda trasera y los 300 mm hacia atrás de la cara posterior a la entrada del cockpit, el cual es más de 25 mm desde la línea central del coche y más de 100 mm por encima del plano de referencia.
b) El volumen comprendido entre los 100 mm y los 300 mm hacia atrás de la cara posterior de la entrada entrada del cockpit, el cual es más de 125 mm desde la línea de centro de coche y más de 100 mm por encima del plano de referencia.
c) El volumen comprendido entre los 100 mm hacia atrás de la cara posterior de la entrada del cockpit y los 450 mm hacia delante de la cara posterior de la entrada del cockpit, el cual es más de 356 mm de la línea central del coche y más de 100 mm por encima del plano de referencia.
d) El volumen comprendido entre los 100 mm hacia atrás de la cara posterior de la entrada del cockpit y los 450 mm hacia delante de la cara posterior de la entrada del cockpit, el cual es más de 125 mm desde la línea central del vehículo y más de 675 mm por encima del plano de referencia.
A raíz de la posición de dicho elemento en el coche y comprobando en la imagen que clarifica la norma (la región coloreada de verde es el volumen que la FIA prohibe con el reglamento antes citado), observamos que estos artilugios no pueden colocarse más allá del suelo ni superar en más de 10 cm de altura el área limitada según el apartado a del artículo 3.8.4, por lo no es viable su instalación.