A diferencia de cualquier otro circuito del calendario de Fórmula 1, las calles de Mónaco tradicionalmente acercan más a toda la parrilla de coches en cuanto a tiempos más que en otro lugar debido al bajo impacto aerodinámico en el rendimiento. Con una velocidad media de 150 km/h, el agarre mecánico y el pilotaje son los factores dominantes que marcan la carrera monegasca, a pesar de que los equipos adornen la carrocería con cuantos elementos aerodinámicos disponibles puedan con el fin de generar más drag que ayude al piloto a un mejor tiempo por vuelta.
A pesar de que el RB10 es el mejor chasis de la parrilla actual, el Mercedes W05 trae un buen número de actualizaciones a cada Gran Premio, por lo que acrecenta la distancia con sus principales perseguidores, Red Bull y Ferrari.
La escudería germana ha expandido el Monkey Seat visto hace dos semanas en Barcelona. La aleta Y100 se configuró el primer día de test y desde entonces se le han ido añadiendo cambios menores para extraer aún más la eficacia de la estela que desprende el escape justo abajo.
El diseño es completamente nuevo, mostrando unas paredes curvas, tentando a los gases a salir rectos hacia arriba. El flujo vertical se induce por dos elementos sinuosos con el objeto de generar upwash (carga vertical), que tanto buscan los equipos en esta área del coche. Estos dos dispositivos han sido redibujados respecto a su predecesor, hechos de titanio en lugar de fibra de carbono para resistir las altas temperaturas de los gases salientes.
Colocado justo arriba, se exhibe un elemento secundario, curvo que reúne el flujo impulsándolo hacia arriba en dirección el alerón posterior.
El panel superior horizontal es un componente que probablemente ayude a condicionar el flujo cuando el coche está girando. Estimulando el aire a subir lo más arriba posible cuando la velocidad del monoplaza incrementa. Esto provoca que las bajas presiones creadas por los gases del motor bajen hasta el difusor exprimiendo el rendimiento gracias a las derivas inferiores.
Por otra parte, Mercedes ha curvado el borde de ataque del ‘ala de murciélago’ que instala en la parte baja del chasis aumentando el énfasis que este componente tiene en dirigir con una mayor velocidad el aire que circula por esta región hacia los laterales del coche, es decir, toda la zona de los bargeaboards y pontones.